Para realizar una prueba de funcionamiento a una electroválvula, es necesario cerciorarse que el solenoide este en buen estado y funcionando.
La bobina se revisa instalada en la válvula y aplicándole voltaje para que haga el funcionamiento de accionamiento de embolo, el cual realizará la función de abrir o cerrar la válvula según sea el caso.
Como se muestra en la siguiente figura en una válvula normalmente cerrada, podremos probar su funcionamiento aplicándole fluido ya sea agua o aire. Si la válvula es N.C, una vez que se le aplica el flujo, ésta no debe permitir el paso a la salida de la misma, hasta que sea energizada por el solenoide, al cual para realizar esta función necesitamos aplicarle voltaje.
Una vez que aplicamos voltaje al solenoide, la válvula se abre y deja salir el flujo, le volvemos a retirar el voltaje y debe de cerrar el paso del flujo por completo. Si alguna de los pasos antes mencionados no sale como en la descripción quiere decir que hay alguna falla ya sea en el diafragma o en el solenoide. Para revisarla se tendría que desarmar por completo y revisar pieza por pieza.
Posibles fallas
- Diafragma: en válvulas N.C que no esté en buenas condiciones o bien este agrietado. Esto ocasionaría que no cerrara el paso total del flujo y siga permitiendo el paso del mismo. Otro factor importante es la presión mínima necesaria para que el diafragma se posicione correctamente sin voltaje.
- Muelle o resorte de embolo: al estar dañado impide el cierre total del embolo, dejando el orificio de caudal abierto y no logrando impedir su flujo.
- Bobina o solenoide: revisar que esté funcionando a la perfección y que sea el adecuado para la válvula que se va a utilizar, si la potencia de la bobina (VA o WAT) es inferior a la indicada no tendría la suficiente fuerza para accionar el embolo de la válvula y en este caso no permitiría el paso del flujo.